lunes, 17 de noviembre de 2014

“La experiencia personal de ingreso a la profesión docente”

LO QUE SE DE MI
Mi nombre es Gloria Rivera Romero,  estudie la licenciatura en administración,  como no encontré trabajo en lo que había estudiado, con el apoyo del secretario de educación de aquella época logre entrar al sistema educativo para desempeñarme como docente de educación primaria, obviamente estaba feliz porque tenía un empleo, pero….  ¡no era justamente el que yo deseaba!,  sin embargo de niña siempre jugaba a la maestra ¡he!. . .  Y ahora si era de verdad.
Era un día muy fresco de noviembre, me fui vestida como ejecutiva, cosa que era incómodo para realizar mis actividades docentes, ¿cómo docente? ¿Cómo era eso? ¡no sabía!,  . ya nos estaban esperando, tuve la fortuna de que el Profr. Chonito me acompañara pues él era el supervisor y de antemano ya había avisado a los compañeros de la escuela “Guadalupe Victoria” de la comunidad de Apezco, Zimapán, Hgo. Mi llegada.
Los niños estaban formados para el homenaje y había la presencia de algunos padres de familia,  me sentía nerviosa, imaginaba que debía hacer las cosas muy bien pero…. ¿Qué era hacer las cosas bien?  Desde luego me remonte a los días en que fui estudiante de primaria y supuse que podría trabajar así, entonces decidí actuar como mamá y creo que eso fue mi éxito, pensé, después del homenaje, entrar al salón, presentarme con los niños y ellos conmigo,  checar la lista de asistencia y luego preguntarles en que iban y que les había enseñado su maestro anterior pues cabe mencionar que me dieron 1º y 2º grados uff!
Los niños solo me quedaban mirando sentados ordenadamente y calladitos, inicie cantándoles la canción del Conejo Blas y escribí en el pizarrón una estrofa, que después leímos todos, ahí pude darme cuenta que los niños no sabían leer ni los de 1º ni los de 2º, ¡había que hacer algo urgente!  ya que era noviembre y ni siquiera los de 2º leían, no preciso si eran 22 o 23 niños en total,  pero lo que sí sé  ¡es que me dio mucho miedo!, poco a poco los niños fueron teniendo confianza conmigo y hablaban más, cosa que me facilito poder acercarme más a ellos para poder conocerlos y buscar la forma de apoyarlos. Porque la verdad me daba pena que mis compañeros se dieran cuenta que no sabía que hacer… En fin poco a  poco me fui encontrando, pues estaba perdida, busque  ayuda en la compañera  Bertha Sánchez Rincón quien me apoyo con su método tan eficiente y sus consejos, situación  que permitio que la mayoría de mis niños alcanzaran la lecto-escritura, hecho que mi supervisor valoro desde el primer año de servicio, por lo que tiempo más tarde me invito a ser ATP. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario